Bingo en Ecuador… una Historia Peculiar
En este país latinoamericano del Ecuador, la historia del bingo y de los juegos de azar en general, es sumamente particular.
El bingo llegó a este país de igual forma que lo hizo en la mayoría de países latinoamericanos: como una actividad entretenida a través de la cual pequeñas comunidades e iglesias recaudaban fondos que más tarde destinarían a sus causas benéficas.
Poco a poco se fue popularizando el bingo en Ecuador, hasta ocupar el espacio de los grandes salones de juego de los casinos más lujosos e importantes del país, como el Montecarlo o el Best Western Hotel Casino, entre otros.
El juego de bingo en Ecuador comenzó a arraigarse fuertemente en la tradición ecuatoriana. Nombres como Súper Bingo, Bingo Manta y Bingo de la Fundación Padre Antonio Amador [1], son aún populares entre los ecuatorianos pues llegaron a representar importantes eventos benéficos anuales, algunos con más de once años de historia, en los que se recaudaban fondos para repartir posteriormente en diferentes fundaciones y causas sociales.
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Sin ir muy lejos, el bingo de los pueblos agrupaba a toda la comunidad y le permitía reunir el dinero necesario para solventar gastos urgentes, como reparar una sección de la escuela o dotar a la patrulla de bomberos, por ejemplo.
En estos pueblos, las cartolas (forma de llamar a los cartones) se marcan con granos como maíz o fríjol, y los jugadores veteranos, con años de experticia en el juego de bingo, cuentan con fichas personalizadas para realizar la marcación: canicas valiosas o monedas como peniques o de alguna rara denominación.
*Conoce como se juega el Bingo de 30 Bolas.
Rafael Correa Prohibe los Juegos de Azar en Ecuador
Pero la historia de esta actividad se vuelve peculiar el 7 de mayo del 2011, año en el que Rafael Correa, presidente del país desde el 2007, convocó un referéndum para consultar al pueblo ecuatoriano sobre diferentes cuestiones sociales y políticas.
Una de las propuestas consignadas en el acto, trataba la existencia de casinos y lugares para los juegos de azar. Concretamente, la papeleta sugería al votante: “Está usted de acuerdo que en el país se prohíban los negocios dedicados a juegos de azar, tales como casinos y salas de juego”.
El 45,8% de los electores aprobaron esta propuesta, así que se en el 2011 se decidió por el cierre generalizado de salas de bingo y casinos en todo el país del Ecuador, en vivo. Esta orden se hizo efectiva seis meses después, en el año 2012. Aclaremos que esto es para los casinos y salas en vivo, ya que aun puedes jugar bingo online al igual que al casino en línea por medio de las salas de bingo que recomendamos.
Este plazo tenía contemplado dar oportunidad a empresarios del juego, multinacionales y jugadores para que se adaptaran al inminente cierre, que incluiría la exportación o cauterización de inmuebles específicos del juego, como máquinas, ruletas y demás aparatos de azar.
De modo que desde el 2012, no existen legalmente casinos en el país ecuatoriano.
Repercusiones de Las Leyes de Juego de Azar en Ecuador
Pedro Sánchez, presidente del Casino Montecarlo, opinó que la resolución de los electores venezolanos (sorprendente para muchos) fue motivada por la satanización del azar en general, gracias a las salas ilegales que “taladraron el bolsillo de los ecuatorianos humildes”.
Igualmente, es innegable la existencia de un imaginario que relaciona estos sitios con la evasión de impuestos, el deterioro del ciudadano y de la moral en general.
Esta medida fue ampliamente polémica: desde operarios del juego, dueños de hoteles y sitios de recreación, hasta el simple empleado o jugador recurrente del sitio, expresaron su inconformidad por esta medida, que sin embargo no pudo ser revocada.
Algunos hoteles de primera categoría lograron que el Ministerio de Turismo les otorgara un plazo de tiempo mayor para cesar estas actividades. Aun así, funcionarios como Fausto Flores, ex presidente de la Asociación de Casinos y Bingos del Ecuador, así como otras asociaciones involucradas en el gremio, manifestaron varios motivos para esta inconformidad:
• Más de cinco mil ecuatorianos perdieron su empleo por este cierre, casi la mitad de forma definitiva, lo que afectó a unas 3,000 familias en total.
• Incluso si una porción de estos ciudadanos consiguiesen otro tipo de empleo, les sería difícil igualar el salario de US$1,200 mensuales que dejaba el trabajo como operario.
• 22.000 personas en papel de proveedores fueron afectadas.
• Las ganancias anuales de estos juegos ascendían a los US180 millones, y se desviaron a otros países como Colombia, Costa Rica y Puerto Rico, junto con muchos de los inversores.
• Desde su llegada al país, 50 años antes, los casinos habían creado y mantenido unos US $17’000.000 en territorio ecuatoriano.
Inclusive las agencias de turismo se vieron obligadas a extraer inversión de este país
Hoy en día, extranjeros y ecuatorianos pueden conseguir paquetes turísticos en donde se ofrecen tours en los mejores casinos de Panamá, bebidas y fichas, todo en el mismo paquete y modificado por actividades extra elegidas por el cliente.
El cierre de casinos en Ecuador ha tenido un inevitable impacto positivo en el turismo panameño (en Panama) y ha convertido en los jugadores ecuatorianos en público objetivo de las principales agencias de viaje.
No queda claro del todo claro si los bingos para causas sociales, deportivas o artísticas, se encuentran también censurados o si en un futuro habrá un manejo más claro que permita a los ecuatorianos y turistas del país disfrutar del azar sin preocupar al Gobierno y sin descuidar las finalidades de este peculiar mandato popular.
Enlaces de Interes
[1] eluniverso.com, Fundación Padre Antonio Amador organiza bingo por los jóvenes, 2013
[2] tributarium.blogspot, Impuestos a Casinos en Ecuador, 2014